Dia 39. Camino a Panama City

Este dia decidimos ir para la ciudad de Panama, nos informamos y asi supimos que la ciudad de Panama estaba como a unas 10 hs de distancia y que salia un colectivo desde Almirante como a las 19 hs, asique tendriamos toda la mañana libre, ya que con salir a las 16 hs de la isla en la que estabamos hacia Almirante llegabamos mas que bien (eso si, queriamos llegar un poco antes porque teniamos que comprar los pasajes y los lugares suelen agotarse).
Con Angie y Puma decidimos ir a una playa que nos habian dicho era hermosa, y que quedaba al otro lado de la Isla en la que estabamos, para lo cual tuvimos que tomar un colectivito y hacer un viaje como de 30 mins. Limon prefirio quedarse a acomodar fotos y escribir mails.
A la playa en si no llegamos porque de donde nos dejaba el colectivo debiamos tomar una lancha o caminar como 30 min mas, y como debiamos volver en unas 2 horas, nos parecio un desperdicio de tiempo ir hasta ahi, asique caminamos un poco por la playa y nos quedamos en un lugar buenisimo en el que el agua era como de piscina (ojo que no puse ni alberca ni pileta, asi no hay reclamo de ningun lado, escribo lo mas neutro que puedo, je) y estaba lleno de palmeras, como se imaginaran, Puma y yo batallamos con una palmera para bajar un coco, el cual, luego de darnos pelea termino por ceder y servirnos de bebida y alimento respectivamente. Viendo que se hacia la hora de vuelta, fuimos hacia donde nos habia dejado el colectivito, ahi un lugareño nos convido mas coco (ya que nos vio comiendo el que habiamos bajado) pero nos dio uno mas seco, super rico, y nos hizo probar tambien un coco que ya tenia un brote, la parte del centro se hace como de Poliestireno expandido (Telgopor para los Argentos, Unicel para los Mexicas) pero con rico sabor, de tan entretenidos tuvimos que correr como 400 mts el colectivo porque casi nos deja.
Vovlimos al hotel, preparamos las mochilas y nos tomamos el bote a Almirante, de ahi fuimos a la estacion de colectivos, compramos los pasajes y comimos algo porque sabiamos que nos esperaba un largo viaje.